Claude Debussy. Arabesca



Arabesque No 1

El joven Claude Debussy, de veintidós años, estaba enamorado de la bella soprano de hermosos ojos verdes con voz de ruiseñor Madame Vasnier.  La encantadora mujer tenía 30 años, era madre de dos hijos pequeños y llevaba trece años casada con un experto abogado, algunos años mayor que ella.

Este matrimonio acostumbraba a recibir en su casa a artistas y músicos, donde el jovencísimo Claude, tocaba el piano para acompañar a la soprano en sus florituras vocales. No es difícil entender que el muchacho callera rendido a los pies de Madame Vasnier.  

Desafortunadamente, para Debussy a Marie-Blanche Vasnier jamás se le pasó por la cabeza la idea de abandonar a su esposo.

No era la primera vez que el músico se enamoraba de manera impropia. Le sucedió antes con una hija de Nadezhda von Meck la mecenas y protectora de Tchaikovski. Tuvo la audacia de pedir  a la señora von Meck la mano de su hija Sonia, su alumna, que junto a sus hermanos tomaba clases de piano con el joven maestro desde hacía tres veranos. Ese fue naturalmente el último.


Madame Vasnier 



Arabesque No 1

Hasta 1884, Debussy escribió más de veinte canciones para madame Vasnier. Cuando  las relaciones se debilitaron, el maestro compuso menos música para canto y piano, enfocando su creatividad  en las composiciones para piano solo, que culminarán en 1890 con un novedoso lenguaje pianístico, el que muestra la Suite Bergamasque (de la que forma parte el célebre Claro de luna. Es también por estas fechas  que compuso los Deux Arabesques, siendo el NO 1 el que os presentamos hoy.

La pieza, se estructura en dos secciones, comienza en la tonalidad de Mi mayor haciendo uso de técnicas que más tarde se llamará "impresionismo musical".
La sección B, algo más calma y reflexiva, se asienta en la tonalidad subdominante (La mayor),
 






 


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